A mi edad, hay un montón de cosas que mi salud y la fuerza ya no me permiten que lo haga. A veces, cuando Franklin se encuentra de visita, en tono de broma le ofrezco este consejo: “No te pongas viejo”, pero todavía hay muchas cosas que puedo hacer, y uno de ellas es orar. He estado orando fervientemente para que podamos tener un despertar espiritual fresco en Estados Unidos.
Si alguna vez hubo un momento en que este país necesitaba la intervención de Dios es ahora. Podemos y debemos orar por Estados Unidos en su conjunto, pero recuerda que cuando Dios se propone cambiar una nación, comienza por cambiar a las personas. Se inicia con los individuos. Cuanto más oro, más profundamente siento que “My Hope America” es el alcance adecuado para este país hoy en día.
Yo ya estoy oyendo informes acerca de las personas que han dado su corazón a Cristo este verano durante las primeras fases de este alcance, y eso me emociona.
En noviembre, cumpliré 95 años y tendremos un nuevo especial en video y TV de My Hope America, disponible en todo el país, contaremos varias historias maravillosas de la vida real de las personas cuyas vidas fueron transformadas por Jesucristo entretejido con un mensaje de mi corazón acerca del poder sanador del evangelio. Ya estoy trabajando en esto.
Junto con todas las visitas de aliento de nietos y bisnietos de este verano, he tenido un equipo de cámaras de vídeo que están ayudándome a grabar desde mi casa, las cosas que creo firmemente que Dios me está guiando a decir a Estados Unidos. Por favor, oren para que Dios obre en la realización de este programa y que Él lo utilice de una manera poderosa.
Usted puede invitar a la gente que conoce para ver el programa con usted en noviembre. Pídale a Dios toque sus corazones cuando vean los testimonios de miles y miles de creyentes de todas partes del país que se están preparando para hacerlo.
Dios anhela ver transformadas a las personas, Él te invita a colaborar con Él como Él busca atraerlos a sí mismo. Si quieres ver sanado el corazón de alguien y el futuro eterno asegurado, debe estar orando.
La Biblia dice: “Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles”, Romanos. 8:26. Esto significa que cuando nos levantamos intencional y fielmente por los nombres de nuestros amigos perdidos y seres queridos nuestras oraciones son escuchadas en la sala del trono del cielo, es el Espíritu Santo que está suplicando, llorando y orando por nosotros.
De esta manera, nos convertimos en socios reales con Dios, “como colaboradores suyos, os exhortamos también a que no recibáis en vano la gracia de Dios”, 2 Corintios 6: 1 y nuestros esfuerzos de levantarnos del plano inferior de la duda y la vacilación y pasar al alto plano de la creatividad de Dios.
Como colaborador con Dios, no es necesario estar ansioso acerca de cómo hacer que todo funcione. No se puede llamar a alguien a Cristo, pero Dios puede: ” Porque así ha dicho Jehová el Señor: He aquí yo, yo mismo iré a buscar mis ovejas, y las reconoceré”, Ezequiel 34: 11. Pídele que haga eso.
Por encima de todo, pedimos sus oraciones y la participación para que la esperanza del Evangelio pueda tocar no sólo la gente de todo el país, sino que la gente lo conozca personalmente. La Biblia dice: “Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente”,(Apocalipsis 22:17). Únete a mí para pedir a Dios para darle a la gente sed de Dios.
Traducido y adaptado por NoticiaCristiana.com de BillyGraham.org